La Dirección General de Tráfico (DGT) ha propuesto una modificación del Reglamento General de Circulación para mejorar la seguridad de los usuarios vulnerables de las vías. Entre las medidas más destacadas, los conductores deberán reducir su velocidad en al menos 20 km/h por debajo del límite cuando adelanten a ciclistas, además de mantener una separación lateral mínima de 1,5 metros. También se exige el uso obligatorio de casco de protección por parte de los ciclistas en carretera, salvo por razones médicas graves, y la incorporación de elementos luminosos o retrorreflectantes en condiciones de baja visibilidad. Para los motoristas, se permitirá circular por el arcén en caso de retenciones y se exigirán guantes de protección y casco integral o modular. Los autobuses tendrán una velocidad máxima de 80 km/h si viajan con pasajeros de pie o sin cinturones de seguridad. La propuesta se encuentra en fase de audiencia pública hasta el 26 de julio y será evaluada por distintos ministerios antes de su posible aprobación en el Consejo de Ministros.
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