El Ayuntamiento de Madrid ha anunciado una serie de medidas para fomentar el uso del transporte público y reducir el tráfico en el centro de la ciudad. Entre las principales acciones se incluye la extensión de las zonas de bajas emisiones y la implementación de nuevos carriles exclusivos para autobuses. Estas iniciativas buscan disminuir la contaminación y mejorar la calidad del aire, en consonancia con los compromisos medioambientales de la capital. Además, se reducirán las tarifas para el transporte público en horarios específicos, incentivando a los ciudadanos a optar por este medio en lugar de sus vehículos privados.
Por otro lado, se incrementará la frecuencia de los servicios de metro y autobús durante las horas pico para facilitar el desplazamiento de los trabajadores. El Ayuntamiento también está trabajando en la creación de más aparcamientos disuasorios en las afueras de la ciudad para integrar el uso del coche con el transporte público. Estas medidas forman parte de un plan estratégico a cinco años que pretende posicionar a Madrid como un referente en movilidad sostenible y mejorar la vida urbana de sus habitantes.
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