En un evento que ha reunido a algunos de los talentos más prometedores de la gastronomía regional, los 28 finalistas del concurso gastronómico han demostrado su destreza y creatividad culinaria empleando al menos un ingrediente con el distintivo M Producto Certificado. Este sello, que avala la calidad y la trazabilidad de los mejores alimentos cultivados, elaborados o producidos en la región, cuenta con más de 4.000 referencias y 500 empresas adheridas.
Después de cuatro intensas horas de trabajo y tras la rigurosa evaluación del jurado, se han seleccionado a Alejandro García y Francisco Amate, del restaurante In-pulso, como representantes para la convocatoria nacional. También destacaron en este certamen los reposteros Mariella Pili y Alberto Barba, del restaurante Saddle.
En la categoría de Gastronomía, los finalistas incluyeron a Guillaume Brun y Osneiver Gabriel Galea, de Inclán Brutal Bar; Nuria del Pino y Alejandra Negrín, del Restaurante Berlanga; Antonio Uzcategui y Luis Díaz, de The Atelier Burger; Alejandro García y Francisco Amate, de In-pulso; Marian Lazar y Jorge Casado, del Restaurante Olmo; y Javier Alfaro y Viviana Caro, de Rosi La Loca.
Los competidores tuvieron que preparar dos platos obligatorios: uno basado en presa ibérica y manitas de cerdo de El Encinar de Humienta, y otro con dorada de Esteros Lubimar. Para ambos platos, fue requisito indispensable utilizar alguna de las más de 4.000 referencias de M Producto Certificado, así como un vino blanco, rosado o tinto de la DO Vinos de Madrid.
En la especialidad de repostería, el reto consistió en la creación de un postre de restaurante con al menos cinco texturas diferentes, incluyendo una de las variedades de Madrid Miel y queso fresco de Albe Lácteas del Jarama. Además, los participantes tuvieron que elaborar un éclair con fresón «Cultivamos lo bueno» de Alcampo y chocolates Maykhel en la masa o en el relleno.
Compitieron en esta categoría Yolanda Rebollo y Erika Santos, de The Westing Palace; Rebeca Sánchez y Alba Sánchez, de La Prima Lejana; Juan Manuel Muñoz y Marta López, de Mindanao Chocolatería; y Mariella Pili y Alberto Barba, de Saddle.
El evento no solo celebró la excelencia culinaria de los finalistas, sino que también destacó la importancia de los productos locales y de calidad, colocando en el centro de la escena gastronómica a los ingredientes con el distintivo M Producto Certificado. La competencia ha demostrado una vez más el compromiso de los chefs y reposteros con la innovación y la tradición, utilizando productos que son un verdadero reflejo de la riqueza culinaria de la región.
