En el marco del evento Hispanidad 2025, la Comunidad de Madrid rinde homenaje a uno de sus más ilustres residentes y figuras literarias: Mario Vargas Llosa. En reconocimiento a su destacada contribución al arte y la cultura, el escritor será el protagonista de una programación especial diseñada por el Gobierno regional, reafirmando la cita del 12 de octubre como una celebración de relevancia nacional e internacional.
La Medalla Internacional de las Artes de la Comunidad de Madrid se presenta como uno de los máximos honores que la región puede otorgar a individuos e instituciones de impacto global en el ámbito artístico. Este reconocimiento pone en valor aquellas creaciones que han ayudado a Madrid a consolidarse como un centro cultural de alcance mundial. Vargas Llosa, un nombre que resuena en los anales de la literatura universal, tiene una relación de larga data con la capital española que se remonta a 1958, cuando llegó a estudiar en la Universidad Complutense.
Durante sus años en la ciudad, el novelista peruano-español alcanzó el doctorado en Filosofía y Letras en 1971, marcando el inicio de una prolífica carrera literaria con la publicación de su primera novela, «La ciudad y los perros» (1963). A partir de entonces, Madrid se convirtió en su refugio creativo durante largas temporadas. En 1993, Vargas Llosa fortaleció aún más sus lazos con España al adquirir la nacionalidad, un año antes de ser elegido miembro de la Real Academia Española.
A lo largo de su carrera, ha acumulado una impresionante lista de galardones, entre los que destacan el Premio Príncipe de Asturias de las Letras (1986), el Cervantes (1994) y el Nobel de Literatura (2010). Su legado cultural también se refleja en la educación, donde la Comunidad de Madrid honra su nombre en dos instituciones públicas situadas en la zona noroeste: el CEIPSO Mario Vargas Llosa de Las Rozas, que se expandirá para incluir la enseñanza de Secundaria a partir del curso 2025/26, y el CEPA Mario Vargas Llosa de Majadahonda.
Este tributo especial en Hispanidad 2025 no solo celebra los logros del escritor, sino que también resalta la integración de la obra de Vargas Llosa en los pilares educativos de la comunidad. Al destacar la figura del autor, Madrid reafirma su compromiso de ser un epicentro cultural de renombre y de tradición literaria, inspiración para nuevas generaciones de artistas y escritores que, como Vargas Llosa, encuentran en sus calles el lienzo perfecto para sus historias.