El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha expresado su rechazo a la reciente declaración de la Real Casa de Correos como lugar de Memoria Democrática, una decisión que ha sido publicada este miércoles en el Boletín Oficial del Estado. Miguel Ángel García Martín, consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local y portavoz del Ejecutivo autonómico, ha señalado que el expediente vinculado a esta decisión «ya ha caducado», dado que ha pasado más de un año desde su inicio hasta la publicación, lo cual, según él, equivale a la notificación de una resolución.
García Martín ha tachado la declaración de «sectaria y contraria a la historia y a la verdad», insistiendo en que la Real Casa de Correos, actual sede de la Presidencia de la Comunidad de Madrid, ha sido completamente resignificada y representa un «hogar común para todos los madrileños».
Durante la reunión del Consejo de Gobierno, el portavoz autonómico ha reafirmado la intención de «defender los intereses de la institución y de los madrileños», anunciando la presentación de un recurso inmediato amparado, según él, por la ley, la verdad y la historia.
Esta declaración oficial del Gobierno central se basa en un informe solicitado al Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática, y elaborado por la Real Academia de la Historia. El informe asocia la Real Casa de Correos principalmente con el periodo de la Ilustración, destacando su papel central en la vida social y colectiva de Madrid durante el siglo XIX.
La controversia en torno a la designación de la Real Casa de Correos como lugar de Memoria Democrática pone de manifiesto las tensiones entre el gobierno regional y central, y destaca las distintas interpretaciones sobre el rol e importancia histórica de este emblemático edificio madrileño.


