El Consejo de Gobierno ha decidido dedicar una suma de 25 millones de euros en 2025 al programa «Mi Primera Vivienda», diseñado para asistir a los madrileños que, aun siendo solventes y con recursos, no cuentan con el ahorro necesario para adquirir su primer hogar en las condiciones habituales del mercado financiero. Esta medida reafirma el compromiso asumido el año anterior, cuando se incrementó la inversión en 7 millones respecto a 2023, un aumento de casi el 40%, complementando otras medidas para ampliar el número de beneficiarios.
Desde su implementación, «Mi Primera Vivienda» ha facilitado la concesión de 2.779 hipotecas hasta marzo, de las cuales 2.496 ya han sido formalizadas ante notario, acumulando más de 440 millones de euros en préstamos. Más del 60% de estas hipotecas cuentan con dos titulares, lo que no solo amplía el alcance del programa, sino que también refleja su importancia para aquellos que desean iniciar proyectos familiares.
Actualmente, participan ocho entidades bancarias en esta iniciativa del Gobierno regional: CaixaBank, IberCaja, Banco Santander, Abanca, ING, Kutxabank, Unicaja y Banco Sabadell.
El programa se ha reforzado recientemente para continuar apoyando a los jóvenes madrileños en la compra de su primera vivienda. En julio de 2024, se realizaron modificaciones clave en los requisitos para adaptarlos a las realidades sociales y económicas actuales. Se amplió el límite de edad de 35 a 40 años y se incrementó el porcentaje de aval del 95% al 100% del valor de la vivienda. Además, se ha facilitado la inclusión de familias numerosas, monoparentales, y personas con hijos por nacimiento o adopción, eliminando restricciones de edad.
Los beneficiarios de «Mi Primera Vivienda» deben destinar el inmueble a su residencia habitual y permanente durante al menos dos años desde la adquisición. La vivienda, situada en la región, no debe superar un precio de 390.000 euros. Esta iniciativa se presenta como un refuerzo significativo para aquellos que buscan establecerse en la Comunidad de Madrid y potenciar el acceso a la vivienda en un mercado desafiante.