La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha lanzado un contundente llamado a actualizar el servicio universal de telecomunicaciones en España, poniendo de manifiesto la urgencia de aumentar la velocidad mínima de conexión a Internet y mejorar la transparencia de la información que se brinda a los ciudadanos. Esta recomendación se produce tras la designación directa de Telefónica como operadora del servicio universal para los años 2025 y 2026, una decisión tomada ante la escasez de licitadores interesados en asumir la responsabilidad.
Actualmente, el servicio universal garantiza una velocidad mínima de conexión de 10 Mbps en sentido descendente, una cifra que la CNMC considera obsoleta frente a las crecientes demandas tecnológicas y el marco legal vigente, establecido por la Ley General de Telecomunicaciones. Por ello, ha propuesto incrementar este umbral a 30 Mbps. Además, aboga por universalizar velocidades de 100 Mbps, dado que el 93% de los accesos fijos de banda ancha en España ya alcanzan o superan dicha velocidad.
En relación a los límites de datos, la CNMC ha señalado que el actual límite de 45 GB/mes para conexiones a través de tecnologías de tipo inalámbrico o satelital resulta insuficiente para las necesidades actuales. Sugiere elevar este límite a 150 GB/mes, tomando como referencia proyectos como el programa conecta35, dirigido a mejorar el acceso de los ciudadanos a servicios digitales esenciales.
Paralelamente, la CNMC ha destacado la importancia de mejorar la accesibilidad de la información relativa al servicio universal. Para ello, plantea que las condiciones, tarifas y procesos de contratación estén claramente visibles y agrupados de forma accesible en el sitio web comercial de Telefónica, garantizando que los ciudadanos puedan entender y acceder fácilmente a estos servicios.
Otro aspecto crucial en las recomendaciones de la CNMC radica en la definición precisa de las condiciones técnicas bajo las cuales debe garantizarse la velocidad mínima, ya sea en cualquier circunstancia o bajo ciertas limitaciones de la red. Esta precisión es indispensable para asegurar la calidad del servicio y evitar ambigüedades que puedan perjudicar al usuario.
La designación directa de Telefónica, aunque temporal, busca asegurar la continuidad del servicio en zonas alejadas y con menor rentabilidad para el despliegue de infraestructuras, mientras se contempla el ideal de convocar una licitación para una solución más definitiva.
En un movimiento hacia la modernización del servicio universal, el organismo regulador ha instado al Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública (MTDFP) a desarrollar un real decreto que actualice las condiciones del servicio, adaptándolas a las exigencias actuales de la sociedad, garantizando velocidades superiores, límites de datos apropiados y una mayor transparencia.
Con estas medidas, la CNMC pretende asegurar que el servicio universal de telecomunicaciones cumpla su propósito de conectar a todos los ciudadanos, sin importar su ubicación geográfica, y facilitar su acceso a los servicios digitales esenciales en un mundo cada vez más interconectado.