Con una imagen que evoca la estética del steampunk y el sombrerero de Alicia en el país de las maravillas, Linda Perry subió a la fama en 1993 como la voz detrás de 4 Non Blondes y su emblemático tema «What’s Up». Este sencillo, parte de su único álbum Bigger, Better, Faster, More!, se convirtió en un himno atemporal que aún resuena en emisoras de radio y redes sociales, aunque pocos recuerden su origen. Pese al éxito mundial, Perry dejó el grupo por diferencias creativas y una necesidad de evolucionar, dando inicio a una carrera en solitario que la llevaría a redefinir la música pop.
Desde su primer disco en solitario, In Flight, Perry se estableció como una compositora talentosa, especialmente tras escribir y producir «Get the Party Started» para Pink, que revitalizó la carrera de la cantante. Su enfoque emocional y auténtico le permitió colaborar con artistas de alto perfil como Gwen Stefani y Christina Aguilera, con quien creó «Beautiful», considerada un símbolo del amor propio. Además, Perry ha invertido en su propio estudio, Kung Fu Gardens, donde ha apoyado a mujeres artistas. A día de hoy, sigue activa en la música como productora y compositora —comprometida también con causas sociales—, lo que refleja su legado en la industria.
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