El Santuario de Las Lajas, ubicado en el departamento de Nariño, Colombia, se ha consolidado como uno de los principales centros de peregrinación religiosa en el mundo, gracias a su impresionante arquitectura neogótica y las fascinantes leyendas de milagros que lo rodean. Construida entre 1916 y 1949, esta basílica se encuentra a 40 metros sobre el río Guáitara, enmarcada por el majestuoso verde de los Andes. Su edificación presenta imponentes torres de hasta 100 metros y un puente de 50 metros de largo, atrayendo a más de 750.000 visitantes anualmente. Nombrada en 2007 como una de las siete maravillas de Colombia, y destacada por «The Daily Telegraph» como la iglesia más bella del mundo en 2015, el Santuario de Las Lajas no solo encanta por su estética, sino también por el profundo sentido de devoción que inspira.
La historia de su devoción se remonta al siglo XVIII, cuando María Mueses de Quiñones y su hija Rosa, quien era sordomuda, buscaban resguardo de una tormenta en una cueva cercana. Allí, Rosa habló por primera vez, relatando una visión de la Virgen del Rosario, un evento considerado milagroso que motivó a la comunidad a erigir el primer santuario en el lugar. Con el tiempo, la estructura evolucionó, pasando de una simple choza a una majestuosa catedral, convirtiéndose en un símbolo de fe e historias de milagros y curaciones. La tradición de atribuir eventos sobrenaturales y curaciones continuó alimentando la popularidad del sitio religioso, transformándolo en un destino espiritual para millones de personas que año tras año buscan experimentar el misticismo y la paz que emana el Santuario de Las Lajas.
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