La ola de calor que ha azotado España en agosto de 2025 se ha convertido en la más intensa registrada hasta la fecha, con una anomalía de 4,6 grados respecto a las temperaturas habituales, superando el récord de 2022. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), esta ola se extendió durante 16 días y marcó un hito al ser los primeros 20 días de agosto los más cálidos desde al menos 1961. Este fenómeno ha planteado serios riesgos tanto para la salud de las personas vulnerables como para el aumento del peligro de incendios forestales, lo que subraya la importancia de estas condiciones climáticas extremas.
El periodo del 8 al 17 de agosto ha sido catalogado como el más cálido en una década, y cinco de los 20 períodos más calurosos en la historia reciente corresponden a la ola de calor actual, con un predominio notable de eventos similares desde 2022. Tras la finalización de este evento, las temperaturas han vuelto a niveles inferiores a lo normal, aunque se prevé un ligero aumento antes de que se produzca un nuevo descenso. Con las proyecciones actuales, agosto de 2025 podría situarse entre los cuatro más cálidos registrados, marcando una tendencia preocupante ante la incidencia creciente del calor extremo en los últimos años.
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