La 43ª edición del Festival de Otoño de la Comunidad de Madrid se presenta como un vibrante escaparate de la riqueza escénica hispanoamericana, desplegando 23 espectáculos provenientes de 17 países en diversos espacios de la región. La programación de esta semana da inicio con «Coup Fatal», una producción donde el destacado coreógrafo belga Alain Platel combina música y danza en una expresión multicultural.
El toque iberoamericano se refuerza con «Las cosas que perdimos en el fuego», basada en los relatos de Mariana Enríquez. Dirigida por el uruguayo-brasileño Leonel Schmidt, se exhibirá en la Sala Negra. Otro momento esperado es el concierto «Amor imposible» bajo la batuta de Alondra de la Parra, con piezas de Gershwin, Prokófiev y Revueltas, en el Teatro Auditorio de San Lorenzo de El Escorial.
México tiene una presencia notable: Conchi León presenta «Cachorro de León», una introspección autobiográfica en la Sala Cuarta Pared, mientras que Lukas Avendaño llega con «Réquiem para un alcaraván», una performance que exalta la cultura muxe.
El festival se cierra esta semana con «De Púrpura y Melancolía», un diálogo musical entre las raíces chilenas y flamencas, creado por Emilia y Pablo, en los Teatros del Canal. Paralelamente, la Sala Verde acoge «Todos pájaros», una obra aclamada del dramaturgo Wajdi Mouawad, dirigida por Mario Gas.
La oferta cultural se extiende con «Radar Joven», que impulsa el talento emergente en la música, y el «Madrid Urban Fest», que promueve la cultura hip hop. Además, se abren puertas a exposiciones como «Ecos del arte virreinato del Perú» o «Warhol, Pollock y otros espacios americanos» en el Museo Thyssen, entre otras propuestas.
La Comunidad de Madrid se nutre este otoño de una diversidad cultural que estrecha lazos entre continentes y tradiciones, consolidando su papel como epicentro del arte y la escena contemporánea.


