La denuncia presentada por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) contra la instalación del horno incinerador en el distrito madrileño de Usera ha sido archivada por la Fiscalía, según informaron fuentes judiciales. El proyecto, que había suscitado numerosas protestas vecinales y generó un debate público en torno a sus posibles impactos ambientales y de salud, ha quedado libre de impedimentos legales tras la decisión del Ministerio Público. La Fiscalía determinó que no existen indicios suficientes de delito en la implementación del incinerador, uno de los temas que había polarizado la opinión pública en la región, entre preocupaciones ecologistas y la defensa de la gestión eficiente de residuos por parte de las autoridades locales.
El PSOE había argumentado que el incinerador podría presentar riesgos significativos para el entorno y la salud de los residentes, solicitando una revisión exhaustiva de los permisos y el cumplimiento de las normativas ambientales. Sin embargo, la investigación concluyó que los procedimientos administrativos se realizaron conforme a la legislación vigente, lo que permite que el proyecto continúe su curso. La respuesta de la Fiscalía ha dejado a activistas y residentes del área divididos, entre quienes exigen mayores garantías de seguridad y aquellos que confían en las evaluaciones técnicas realizadas. Entretanto, el Ayuntamiento de Madrid se ha comprometido a mantener un monitoreo estricto del funcionamiento del incinerador para asegurar el bienestar de la comunidad local.
Leer noticia completa en El Mundo.