Este sábado, la jueza de guardia de Lleida decidió enviar a prisión sin fianza a un joven de 22 años, entrenador del club Futbol i Formació (FIF) de Lleida, acusado de acoso sexual a dos menores. La decisión se fundamentó en los antecedentes similares del acusado y en la necesidad de evitar la reiteración delictiva. Pese a que el entrenador dispone del certificado negativo de delitos sexuales requerido para su labor, el tribunal consideró que su reincidencia y el uso de su posición para coaccionar a los menores justificaban su detención. El abogado defensor, Joan Argilés, indicó que el acusado niega los hechos y que presentarán un recurso contra la decisión judicial.
Además de los cargos de acoso sexual, se le imputan coacciones, comunicación con menores con fines sexuales, tenencia de material pornográfico y delito contra la intimidad. La jueza subrayó que el acusado tiene «claramente un fuerte instinto sexual» y una predilección por la pornografía infantil, lo que le otorga el perfil de un «depredador sexual». Entre los relatos de las víctimas, se destaca que el entrenador amenazó a uno de los menores con no dejarle jugar si no le enviaba fotos sin camiseta, y en otra ocasión, durante un torneo, lo espiaba mientras se duchaba. También ofreció dinero a cambio de fotografías desnudo, según el testimonio de las víctimas.
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