Un juez colombiano ha condenado a Brayan Campo a 58 años y tres meses de prisión por el feminicidio de Sofía Delgado, una niña de 12 años cuyo asesinato conmocionó al país. Sofía desapareció en octubre pasado tras salir de su casa en Candelaria, Valle del Cauca, para ir a una tienda de mascotas propiedad de Campo, donde fue raptada y asesinada. El cuerpo de Sofía fue hallado 18 días después en una plantación de caña de azúcar cercana. La sentencia, calificada como «ejemplar» por la alcaldesa de Candelaria, ha sido recibida con alivio por la familia de Sofía, que considera que se ha hecho justicia.
El caso ha reavivado el debate sobre el castigo a los asesinos de menores en Colombia, donde varias propuestas de cadena perpetua han sido rechazadas por las cortes. La sentencia contra Campo es una de las más severas en el país, superando incluso casos notables anteriores. La madre de Sofía expresó su gratitud por la justicia y mencionó que esta decisión llega justo antes del cumpleaños de su hija. Campo, quien también fue condenado en febrero por otro crimen similar, cumplirá su pena en la Cárcel La Tramacúa en Valledupar. Este caso ha enfatizado la necesidad de revisar las penas para crímenes contra niños y ha servido como un llamado de atención al sistema judicial colombiano.
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