Un juez federal ha bloqueado la orden del expresidente Donald Trump que buscaba suspender las solicitudes de asilo en la frontera con México. En un detallado fallo de 128 páginas, el magistrado Randolph Moss explicó que la política excede la autoridad presidencial y violaría las leyes migratorias de Estados Unidos. Según Moss, el presidente no puede implementar unilateralmente un sistema alternativo que invalide las legislaciones aprobadas por el Congreso. Esta decisión, que entra en vigor en 14 días, permite tiempo para una posible apelación de Trump que podría llevar el caso a una instancia judicial superior. A pesar de que el gobierno argumenta que la situación actual es una emergencia de seguridad nacional, Moss sostiene que ni las leyes ni la Constitución permiten al presidente rechazar el asilo a personas ya en el país.
La resolución responde a una demanda presentada por organizaciones defensoras de los derechos civiles y de inmigrantes que argumentan que la orden de Trump pone en riesgo la vida de miles de personas que buscan refugio. Estas organizaciones, junto con varios individuos afectados, alegan que el gobierno está devolviendo a solicitantes a países donde enfrentan persecución, algo que el Congreso ha prohibido. La decisión de Moss resalta un choque de poderes entre las órdenes ejecutivas de Trump y las legislaciones sobre inmigración aprobadas por el Congreso. La Unión Americana de Libertades Civiles celebró el fallo, destacando su importancia para la protección de quienes huyen de peligros graves. Este caso subraya el debate persistente sobre la autoridad presidencial y los derechos de los inmigrantes en Estados Unidos.
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