El tribunal ha determinado que el expresidente Donald Trump infringió una ley de 1878 al utilizar soldados federales para tareas de seguridad pública. Esta legislación, conocida como Posse Comitatus, prohíbe explícitamente el despliegue de tropas del ejército en funciones de orden interno, salvo que el Congreso autorice lo contrario. La sentencia subraya que estas acciones del exmandatario durante su mandato pasaron por alto las restricciones legales diseñadas para preservar la separación entre las fuerzas militares y las labores de seguridad interna.
La resolución judicial llega tras una serie de críticas y demandas surgidas por el despliegue de tropas en diversos estados durante protestas y disturbios. Este fallo podría abrir la puerta a nuevas investigaciones sobre la administración anterior y sus decisiones en materia de seguridad nacional. Analistas políticos señalan que el veredicto podría tener implicaciones significativas para futuros gobiernos en cuanto al manejo de la intervención militar en asuntos domésticos.
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