En un dramático rescate en el Mediterráneo, la ONG española Open Arms rescató a 54 eritreos, incluidos dos recién nacidos, Juba y Glory, de una plataforma petrolífera abandonada en alta mar. La niña eritrea Juba nació el 5 de junio de 2025 en esa precaria estructura, mientras su grupo buscaba escapar de la feroz dictadura de su país. Tras zarpar de Libia en un bote hinchable y alcanzar la plataforma antes de que se hundiera, fueron salvados por el velero «Astral». Bajo condiciones extremas y en la oscuridad, el equipo de rescate enfrentó el desafío de bajar a las personas desde la peligrosidad de la plataforma oxidada y tambaleante.
El rescate presentó complicaciones inéditas, dado el deterioro de la estructura y la amenaza constante del mar agitado. La plataforma Didon Field, nunca antes utilizada para tal operación, fue el escenario donde el equipo encontró a los migrantes desesperados. A pesar de las restricciones impuestas por el gobierno italiano, que complican y dilatan el acceso a puertos seguros, Open Arms logró llevar a los rescatados a Lampedusa, su destino más cercano. En el trayecto, el «Astral» también prestó auxilio a otra embarcación de goma con 109 personas a bordo. La misión permitió salvar vidas, destacando el papel crucial de las ONG en estas operaciones humanitarias a pesar de las crecientes dificultades políticas y logísticas.
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