El ciclista español protagonizó una destacada actuación en la etapa de montaña de la Vuelta a España. Atacó decisivamente en el primer puerto del día, imponiendo un ritmo que sus principales competidores no pudieron seguir. Su estrategia de adelantarse desde el inicio le permitió gestionar la ventaja a lo largo del recorrido, mostrando un gran dominio sobre el terreno y confianza en su capacidad para mantener el liderazgo frente a sus rivales más cercanos.
En los últimos kilómetros, a tan solo 11 del final, lanzó un nuevo ataque que aseguró su victoria, dejando atrás a quienes intentaban cerrar la brecha. Esta victoria reafirma su creciente reputación como uno de los ciclistas más competentes en escenarios de alta montaña y subraya sus aspiraciones dentro de la clasificación general de la competición. Su equipo celebró el triunfo, destacando la táctica y determinación del corredor en un día crucial para sus aspiraciones en la Vuelta.
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