A los 13 años, el joven talento del flamenco se trasladó de su natal Jerez a la vibrante ciudad de Madrid, donde comenzó a cantar en un tablao, marcando el inicio de una carrera que revolucionaría el género del flamenco. Con el tiempo, se convertiría en un pionero al fusionar este estilo tradicional con otros géneros musicales, rompiendo barreras culturales y alcanzando una amplia audiencia. Su innovador álbum ‘Aire’ no solo redefinió el flamenco moderno, sino que también se consagró como el disco más vendido en la historia del género, estableciendo un antes y después en la música flamenca.
Hoy, el artista, considerado el mejor cantaor vivo, reside en Pozuelo, una tranquila localidad cercana a Madrid, donde reflexiona sobre su vida y su legado. A pesar del reconocimiento y el éxito alcanzados, continúa explorando nuevas formas de expresión en la música, inspirado por su deseo de evolución constante y su conexión inquebrantable con sus raíces flamencas. En este espacio personal, lejos de los reflectores, mantiene viva la esencia del flamenco mientras sigue desafiando los límites de la creatividad musical, integrando nuevos ritmos y enriqueciendo el legado que sigue forjando con cada nota.
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