El Hospital Gregorio Marañón ha sido el epicentro de un enriquecedor debate médico durante la 2ª Jornada de Actualización sobre la Infección por Clostridioides difficile (ICD). Este evento multidisciplinar reunió a expertos nacionales para abordar los avances y los desafíos que supone combatir esta infección bacteriana, una preocupación creciente para los sistemas sanitarios en todo el mundo.
La ICD, identificada como una de las infecciones hospitalarias más prevalentes, afecta a miles de personas cada año, con más de 124.000 casos reportados anualmente en Europa. Las cifras son alarmantes: un 25% de los pacientes padece recurrencias tras el primer episodio, impactando severamente a los mayores de 65 años y a personas con sistemas inmunitarios comprometidos. La doctora Patricia Muñoz, al frente del Servicio de Microbiología del Marañón, subrayó que la gestión de esta infección acarrea una significativa carga hospitalaria, económica y personal para los afectados.
Durante la jornada, se hizo hincapié en la identificación de factores de riesgo asociados a las recurrencias. La edad se señaló como el principal riesgo individual, pero se evidenció que la vulnerabilidad alcanza también a pacientes con enfermedades inflamatorias intestinales, inmunodepresión o que se encuentran en cuidados críticos. La doctora Esperanza Merino resaltó la importancia de un tratamiento adecuado desde el inicio para reducir las tasas de recurrencia, incluso en los pacientes inmunodeprimidos.
Una de las conclusiones clave del evento fue la necesidad de anticiparse a posibles brotes hospitalarios mediante estrategias de diagnóstico precoz y medidas rigurosas de aislamiento y limpieza. El Dr. Luis Alcalá destacó el papel crucial de la PCR y las técnicas de secuenciación genética para prever brotes y controlar la transmisión en entornos hospitalarios. Además, se abogó por el establecimiento de protocolos coordinados que aseguren la continuidad de cuidados durante toda la estancia hospitalaria del paciente.
El simposio también exploró nuevas direcciones en el manejo de la ICD, incluyendo el desarrollo de modelos predictivos y el enfoque «One Health», que integra salud humana, animal y ambiental. El doctor Javier Cobo propuso un replanteamiento en el abordaje de la infección, enfocándose más en la identificación de pacientes que beneficiarán de medidas preventivas intensivas para evitar complicaciones graves.
La conferencia inaugural estuvo a cargo del profesor Emilio Bouza, quien brindó una visión sobre la evolución histórica y futura de esta enfermedad, destacando el liderazgo del Hospital Gregorio Marañón en la investigación y tratamiento de enfermedades infecciosas. Esta jornada reafirmó que el compromiso continuado y la cooperación interdisciplinaria son fundamentales para minimizar el impacto de la ICD en los pacientes y los sistemas de salud.
