El alpinista y esquiador estadounidense Jim Morrison ha conquistado un hito histórico al convertirse en la primera persona en esquiar la cara norte del Everest, logrando la hazaña el 15 de octubre. Morrison, de 50 años, utilizó una combinación de los Corredores Hornbein y Japonés, una ruta conocida por su peligro e intensidad, que se considera la más directa y, a su vez, una de las más expuestas de la montaña. El alpinista completó su ascenso tras seis semanas y media en la montaña, acompañado por un equipo de 11 personas, incluyendo guías y una cámara de filmación, mientras operaba en un ambiente severo tras fuertes vientos que afectaron la nieve.
Mientras celebraba su éxito, Morrison esparció las cenizas de su anterior pareja, la esquiadora Hilaree Nelson, quien perdió la vida en 2022 durante una caída cerca del Manaslu. Este emotivo gesto añadió una capa sentimental a su logro. Las condiciones de la montaña presentaron serios desafíos, incluyendo áreas de roca desnuda que requirieron un rapel de 198 metros. Al finalizar su descenso, Morrison completó la travesía en menos de cinco horas, reafirmando su reputación como un destacado esquiador de montaña y convirtiendo su éxito en un tributo a sus pasadas tragedias personales, mientras también se enfrenta a un arduo legado en el ámbito del esquí extremo.
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