En el intenso debate político dentro de Podemos, Echenique criticó a un miembro del partido por supuestamente negociar con un «neonazi» que tenía la intención de «asesinar» a árabes, mientras que Belarra lo acusó de «compadrear» con la ultraderecha. Este miembro, blanco de controversias en redes sociales, fue vilipendiado por grupos xenófobos, quienes lo acusaron de «amenazar a los patriotas con porra». Sin embargo, su labor diaria es vista de manera diferente por sus allegados, quienes destacan su papel fundamental como mediador en situaciones de tensión.
Trabajando en el equipo de servicios sociales, este individuo se mantiene en contacto constante con la comunidad inmigrante, una tarea que muchos consideran clave para la integración y el entendimiento mutuo. Sus compañeros resaltan su habilidad para mediar en situaciones complejas, buscando siempre el diálogo como herramienta principal para resolver conflictos. A pesar del ruido y las críticas, su compromiso con los inmigrantes y su esfuerzo por construir puentes entre comunidades son vistos como aspectos esenciales de su trabajo dentro del equipo.
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