La reconocida actriz, quien recientemente fue galardonada y se encuentra promoviendo su nueva película «Die My Love», ha expresado su profunda preocupación por la tensa situación en Gaza. Durante su aparición en un evento, la actriz se mostró crítica de cómo se está manipulando a los artistas en el actual clima político. Según ella, en lugar de abordar los problemas de fondo, se están usando las voces del sector cultural para alimentar el debate público y desviar la atención de los «verdaderos responsables» del conflicto.
En sus declaraciones, la actriz manifestó su descontento por la instrumentalización del arte y la cultura en contextos políticos, enfatizando la necesidad de una discusión más introspectiva y responsable sobre las causas reales del conflicto en Gaza. Su postura destaca la importancia de no dejarse llevar por distracciones superficiales y centrarse en lo que verdaderamente está en juego, sugiriendo que un enfoque honesto y directo podría influir positivamente en la resolución de las tensiones actuales.
Leer noticia completa en El Mundo.