Estados Unidos ha condenado la reciente visita del ministro de Seguridad Nacional de Israel, Itamar Ben Gvir, a la Explanada de las Mezquitas, calificándola como una «acción provocativa» que incrementa las tensiones en la región. El secretario del Departamento de Estado, Antony Blinken, afirmó que Washington se opone firmemente a estas acciones, las cuales violan el ‘statu quo’ histórico de los lugares sagrados de Jerusalén. Blinken también destacó la inconsistencia de estas acciones con la política oficial de Israel y urgió al gobierno israelí a prevenir incidentes similares en el futuro, reafirmando el compromiso de Estados Unidos de preservar el equilibrio histórico en la región y oponerse a medidas unilaterales que socavan la paz y la estabilidad. Ben Gvir, por su parte, defendió el derecho de los judíos a rezar en la zona, lo que ha generado preocupaciones entre los musulmanes sobre la posible destrucción de la Mezquita de Al Aqsa.
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