En un reciente aumento de la violencia en Gaza, Israel ha llevado a cabo bombardeos aéreos durante la madrugada del jueves, dejando un saldo de más de 70 muertos según fuentes médicas, la mayoría en la localidad sureña de Jan Yunis. Estos ataques han sido parte de una ofensiva continua desde el pasado martes, coincidiendo con la gira del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por Oriente Próximo, que excluyó a Israel de su itinerario. En total, los bombardeos han causado más de 150 muertes en apenas 48 horas, incluyendo el uso de potentes bombas antibúnker que han afectado principalmente a objetivos civiles, como viviendas y refugios, resultando en numerosas bajas entre mujeres y niños.
Este incremento en los ataques ha causado la paralización del Hospital Europeo de Jan Yunis, alcanzado por segunda vez en 48 horas, el cual era vital para los pacientes de cáncer en la Franja, incluidos los pediátricos. Mientras tanto, Estados Unidos y mediadores árabes, como Qatar, han intentado facilitar un alto el fuego entre Israel y Hamás. Sin embargo, la determinación del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu de alcanzar una “victoria total” en la región ha bloqueado los avances hacia un acuerdo de paz.
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