El ejército israelí lanzó el martes un ataque selectivo contra un cuartel de Hezbolá en Beirut, en represalia por la muerte de 12 menores en los Altos del Golán. El objetivo era Fuad Shukr, considerado el número dos de la milicia chií, a quien Israel dio por muerto. La tensión entre Israel y Hezbolá crece, y el ataque fue condenado por Hamás e Irán. Estados Unidos sigue intentando frenar una posible guerra, mientras el gobierno libanés advierte sobre una respuesta proporcional. El bombardeo intensificó la crítica situación tras 10 meses de enfrentamientos constantes entre ambas partes.
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