Un hombre fue detenido en Petín, una localidad de la provincia de Ourense, relacionado con la presunta comisión de un delito de incendio forestal. A pesar de la gravedad de las acusaciones, el detenido ha recibido un inesperado respaldo por parte de sus vecinos, quienes se congregaron en la puerta de los juzgados para expresarle su apoyo. La comunidad, conocida por su fuerte sentido de solidaridad, ha manifestado su confianza en la inocencia del acusado mientras argumenta que no existen pruebas concluyentes en su contra.
El proceso judicial sigue su curso y el individuo deberá comparecer ante las autoridades para esclarecer su papel en el incidente. La situación ha generado un ambiente de tensión en el pequeño municipio gallego, donde el temor a nuevos incendios forestales se mezcla con la preocupación por la justicia y el bienestar del sospechoso. Las investigaciones continúan bajo un estricto escrutinio, mientras los habitantes de Petín esperan una resolución justa que les permita recuperar la tranquilidad.
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