El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, junto con la vicealcaldesa Inma Sanz y la concejala de Arganzuela, Lola Navarro, visitó hoy el CEIP Joaquín Costa para supervisar las obras de mejora que se están realizando durante los meses de verano. Las actuaciones en este centro educativo son parte de una inversión total de 22 millones de euros que el Ayuntamiento destinará a la renovación y mantenimiento de 183 colegios públicos y escuelas infantiles distribuidos a lo largo de los 21 distritos de la capital.
Este esfuerzo financiero tiene como objetivo mejorar la eficiencia energética y la accesibilidad de los centros, además de combatir las altas temperaturas mediante la instalación de elementos como toldos y pérgolas. En el caso del CEIP Joaquín Costa, las obras, con un presupuesto de 850.000 euros, incluyen la instalación de luminarias led, el tratamiento de paramentos verticales y la renovación de los aseos del patio.
Martínez-Almeida destacó la importancia de estas acciones, afirmando que el “esfuerzo, el talento y la creatividad” de los docentes deben estar respaldados por infraestructuras adecuadas proporcionadas por las administraciones públicas. El alcalde subrayó que la coordinación eficaz con los concejales de distrito ha sido crucial para llevar a cabo esta inversión en un período de tiempo tan breve, asegurando que todas las mejoras estarán listas antes del inicio del curso escolar.
El compromiso del Ayuntamiento con la educación y el bienestar de los estudiantes se refleja también en el incremento del presupuesto destinado a los distritos, que ha aumentado en un 37 % en los últimos cinco años, pasando de 641 millones de euros en 2019 a 881 millones en 2024.
El distrito de Arganzuela, donde se ubica el CEIP Joaquín Costa, es uno de los cuatro distritos que recibirán una mayor cuantía para la realización de estas mejoras, con una inversión total que supera los 2 millones de euros. Villaverde, Fuencarral-El Pardo y Puente de Vallecas también se encuentran entre los distritos más beneficiados.
Estas inversiones, afirmó el alcalde, no solo mejorarán la calidad de las infraestructuras educativas, sino que también representan un compromiso firme con la equidad territorial y con la calidad de vida de los estudiantes madrileños.