Casi 10 toneladas de hachís ocultas entre palés de melones fueron incautadas en el puerto de Algeciras durante una reciente macrooperación antidroga que llevó a la detención de seis personas, todas en prisión provisional. La operación se inició con el seguimiento de un camión frigorífico que llegó en ferry desde Marruecos y que circulaba escoltado por dos vehículos que alertaban a sus conductores de posibles controles policiales. El hallazgo de 9.300 kilos de la droga, con un valor estimado en el mercado superior a los 16 millones de euros, demuestra la sofisticación de los métodos utilizados por las organizaciones criminales para transportar grandes cantidades de estupefacientes.
La intervención no se limitó a este solo envío, ya que cinco días antes, en una operación paralela en Málaga, se descubrieron 1.825 kilos de hachís escondidos en una furgoneta cargada de muebles. Ambas acciones, coordinadas por la Fiscalía Especial Antidroga de la Audiencia Nacional, resultaron en un total de más de 11 toneladas incautadas y diez arrestos. Los investigadores consideran que estas remesas formaban parte de una misma ruta de distribución internacional, con destino final en países europeos, particularmente Francia.
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