Desde este lunes y hasta el próximo domingo, policías locales y autonómicos de diferentes regiones se unen en una campaña de vigilancia intensiva en las carreteras. Esta iniciativa busca reforzar la seguridad vial y reducir los accidentes de tráfico mediante controles más estrictos sobre el cumplimiento de las normativas de circulación. Los agentes estarán desplegados en puntos estratégicos para supervisar el comportamiento de los conductores, poniendo especial énfasis en prácticas de riesgo como el exceso de velocidad, el uso del teléfono móvil al volante y el consumo de sustancias alcohólicas o psicotrópicas.
Esta acción coincide con un aumento en el flujo vehicular en ciertas áreas debido a eventos locales y el inicio de las vacaciones primaverales en algunas comunidades, incrementando así el riesgo de siniestros. Las autoridades han hecho un llamado a la responsabilidad de los conductores, subrayando la importancia de respetar las normas para proteger la vida propia y la de los demás. Además, se ha recordado que este tipo de operativos no solo buscan sancionar infracciones, sino también educar y concienciar sobre la conducción segura como responsabilidad compartida de toda la ciudadanía.
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