En el OCP Global Summit 2025, Intel presentó su innovadora GPU para centros de datos, «Crescent Island», diseñada específicamente para mejorar la inferencia en inteligencia artificial. Este avance busca ofrecer mayor capacidad de memoria por vatio y refrigeración por aire en servidores empresariales. Además, Intel prioriza una pila de software abierta, facilitando el despliegue a gran escala.
Según el CTO de Intel, Sachin Katti, la inteligencia artificial está transitando de entrenamientos estáticos a inferencia en tiempo real, lo que requiere una infraestructura evolutiva. Crescent Island se centra en la eficiencia energética, capacidad de memoria y coste total de propiedad, resaltando el uso de la microarquitectura Xe3P y 160 GB de memoria LPDDR5X, con apoyo para diversos tipos de datos esenciales para modelos de lenguaje extensos.
El movimiento de Intel responde a la creciente demanda de inferencia, donde los centros de datos enfrentan desafíos de latencia y energía. La nueva GPU busca sobresalir en eficiencia energética, capacidad de memoria local, y soporte de datos flexible, todo mientras se enfoca en la refrigeración por aire para facilitar una implementación rápida.
Destacadamente, Intel eligió LPDDR5X para su capacidad en lugar de memorias exóticas, priorizando el equilibrio y el coste contenido. Crescent Island promete eficiencia por vatio, y su microarquitectura Xe3P jugará un papel clave en su desempeño.
Intel enfatiza que la inferencia no se resuelve solo con hardware, sino con un sistema heterogéneo y software abierto, alineado con el espíritu del Open Compute Project. La elección de refrigeración por aire, en lugar de líquida, también posiciona a Crescent Island como una opción para centros que buscan potenciar su infraestructura existente sin necesidad de remodelación significativa.
Con muestras previstas para 2026, Intel busca madurar su pila de software, afinando cargas reales y costos de sistemas para una óptima eficiencia. La estrategia apunta a una oferta integral desde el cliente hasta el centro de datos, reforzando que la verdadera competencia en IA reside en la inferencia.
Para operadores de centros de datos, Crescent Island representa una oportunidad de mejorar la capacidad local y la integración sin grandes modificaciones. Desarrollo en MLOps se verá beneficiado por soportes de datos flexibles, mientras que aquellos que venden IA como servicio encontrarán un enfoque en eficiencia y previsibilidad de costes.
A pesar de la falta de benchmarks específicos, la dirección de Intel es clara: la IA del futuro está en la inferencia eficiente, y Crescent Island está diseñada para liderar ese camino.
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