Santa Clara, California, 22 de mayo de 2025 — En un movimiento estratégico para consolidarse como líder en soluciones de inteligencia artificial, Intel ha presentado su nueva línea de procesadores Intel® Xeon® 6. Estos procesadores, altamente optimizados con núcleos de alto rendimiento (P-cores), están diseñados para gestionar y potenciar los sistemas de inteligencia artificial acelerados por GPU, una tecnología clave que NVIDIA ya ha integrado en su sistema DGX B300.
Los modelos de la nueva serie incluyen innovadoras tecnologías como Priority Core Turbo (PCT) e Intel® Speed Select Technology – Turbo Frequency (SST-TF), que permiten una gestión dinámica y personalizada de los recursos de la CPU. Estas características están especialmente diseñadas para optimizar el rendimiento en entornos de inteligencia artificial, asignando núcleos prioritarios para operar a frecuencias más altas y potenciar la eficiencia del sistema.
El modelo Intel® Xeon® 6776P, que ya está en producción, ha sido seleccionado como la CPU anfitriona para el NVIDIA DGX B300. Este dispositivo se destaca por su capacidad de coordinar tareas del sistema, ofreciendo gran capacidad de memoria y ancho de banda, elementos esenciales para el entrenamiento y operación de modelos de gran escala.
Karin Eibschitz Segal, vicepresidenta corporativa de Intel, aseguró que estos nuevos modelos Xeon representan un salto en el rendimiento gracias a la incorporación de tecnologías como PCT, que mejora la alimentación de datos a las GPUs y maximiza la eficiencia del sistema en su conjunto, especialmente en cargas de trabajo secuenciales.
Entre las características técnicas de los nuevos Xeon 6 se encuentran la alta densidad de núcleos, con hasta 128 P-cores por procesador, una velocidad de memoria un 30% superior a la competencia, y mejoras en el rendimiento de I/O, como un 20% más de líneas PCIe respecto a generaciones anteriores.
Además, los procesadores incluyen soporte para Intel® Advanced Matrix Extensions (AMX), permitiendo cálculos de precisión FP16 que aceleran tareas críticas de preprocesamiento y cómputo en CPU para flujos de inteligencia artificial. Estas mejoras subrayan la apuesta de Intel por la eficiencia energética y la escalabilidad, adaptándose a las necesidades de los centros de datos y despliegues de red actuales.
Con la disponibilidad inmediata de estos procesadores y su integración en sistemas líderes como el NVIDIA DGX B300, Intel refuerza su posición en el mercado competitivo de infraestructura de alta tecnología para inteligencia artificial. Este lanzamiento representa un avance significativo en un momento en que las empresas están modernizando sus infraestructuras para acometer el crecimiento exponencial de los modelos de inteligencia artificial generativa.
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