En un movimiento sorpresivo y estratégico, Intel ha decidido reducir significativamente los precios de sus procesadores Xeon 6 ‘Granite Rapids’, a solo cuatro meses de su lanzamiento en septiembre de 2024. La empresa ha disminuido los precios hasta en 5,340 dólares por unidad, con la mira puesta en contrarrestar la creciente influencia de AMD en el mercado de centros de datos.
Estos recortes no han sido acompañados por un anuncio oficial, pero la actualización en la base de datos pública de Intel, ark.intel.com, confirma los nuevos precios. Las reducciones varían por modelo: el Xeon 6975P, con 96 núcleos, ha bajado en 1,585 dólares, mientras que el modelo tope de gama, el Xeon 6980P con 128 núcleos, ha experimentado el mayor recorte de 5,340 dólares.
Los cambios porcentuales en los diferentes modelos son notables, con reducciones del 30% en la mayoría de los casos. Sin embargo, algunos modelos como el Xeon 6972P y el Xeon 6952P han experimentado caídas del 13% y 20%, respectivamente.
Intel se enfrenta así a una intensa competencia con AMD, especialmente al lograr que su línea Xeon 6 ‘Granite Rapids’ sea ahora más asequible por núcleo en comparación con la serie EPYC Genoa de AMD. Esta estrategia es clave para atraer clientes que operan grandes centros de datos y servicios en la nube, áreas donde Intel busca recuperar terreno.
A pesar de los recortes de precios, el consumo energético de los Xeon 6 sigue siendo una desventaja significativa. Comparados con los procesadores AMD EPYC Genoa, los Xeon presentan un consumo de energía superior, lo que repercute en los costos operativos para los centros de datos. Por ejemplo, el Xeon 6972P de 96 núcleos consume 500W, frente a los 360W del EPYC 9654 con igual cantidad de núcleos.
El cambio de precio no solo intenta detener las pérdidas de cuota de mercado frente a la creciente presencia de AMD, que alcanzó un 24.2% en el mercado de CPUs para servidores en el tercer trimestre de 2024, sino también responde a una posible menor demanda inicial de estos procesadores.
Esta maniobra pone de manifiesto la presión de un mercado de servidores donde AMD y los procesadores basados en ARM, como AWS Graviton 4 y Ampere Altra, están ganando popularidad debido a su eficiencia y relación costo-beneficio.
En este contexto, los recortes de precios de Intel podrían verse como una medida para captar clientes que podrían estar contemplando opciones más eficientes. Aun así, es una oportunidad para que Intel aumente su volumen de ventas y mantenga su vigencia en el competitivo sector de centros de datos.
A medida que AMD amplía su participación de mercado y ARM gana relevancia, Intel deberá seguir ajustando no solo precios, sino también mejorando la eficiencia de sus chips para no perder más terreno en este mercado crucial. La rebaja de hasta 5,340 dólares en los Xeon 6 ‘Granite Rapids’ es una jugada que, mientras hace a los procesadores más atractivos en términos de precio, deberá enfrentar el desafío del consumo energético para retener y atraer a gigantes tecnológicos que priorizan un bajo coste total de propiedad. Intel se encuentra en una encrucijada que le exige innovación constante y adaptación para sostener su posición en un entorno cada vez más competitivo.
