Galicia, Castilla y León, Extremadura y Asturias han comenzado a implementar un conjunto de medidas para abordar los devastadores incendios forestales que han asolado estas regiones durante el mes de agosto. Los gobiernos autonómicos anunciaron ayudas directas destinadas a familias, viviendas, así como a los sectores agrícola, ganadero y empresarial afectados. A nivel nacional, el Gobierno de España ha facilitado el acceso a ayudas por parte de los damnificados, tras declarar las zonas afectadas como emergencias, lo que permite la solicitud de recursos bajo la Ley del Sistema Nacional de Protección Civil.
Los datos indican que las llamas han arrasado más de 362.000 hectáreas en el país, afectando notablemente a 440 municipios. En Galicia, las autoridades han destinado hasta 132.000 euros para la reparación de viviendas dañadas, mientras que en Castilla y León se han aprobado compensaciones de hasta 500 euros para familias evacuadas y ayudas de 5.500 euros para agricultores y ganaderos. Extremadura también ha establecido ayudas directas de 3.000 euros por hectárea de cultivo perdido, y Asturias, con 800.000 euros para explotaciones ganaderas, ofrece compensaciones específicas por cada unidad de ganado afectada.
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