Un reciente estudio ha marcado un hito en la medicina al ofrecer una nueva posibilidad para la detección temprana del Alzheimer a través de un simple análisis de sangre. Este avance involucra a más de 1.700 personas y se ha desarrollado en colaboración entre centros hospitalarios de Barcelona, Suecia e Italia. El resultado, que ha sido publicado en la revista especializada Nature Medicine, destaca el uso de un biomarcador en sangre llamado phospho-tau217 como una herramienta eficaz para la identificación precoz del Alzheimer en la práctica clínica diaria.
El Instituto de Investigación del Hospital del Mar y el Barcelonaβeta Brain Research Center, junto con universidades suecas, han sido los pioneros de esta investigación que promete transformar la manera en que se detecta esta enfermedad neurodegenerativa. Según los hallazgos, el análisis automatizado presenta una precisión que supera el 90% en la identificación de pacientes con Alzheimer, estableciendo un nuevo estándar frente a métodos más invasivos como la punción lumbar o el uso de PET.
El estudio sugiere que los niveles de phospho-tau217 pueden ayudar a los médicos a clasificar a los pacientes en diferentes categorías, facilitando las decisiones sobre la necesidad de pruebas adicionales o la confirmación de la enfermedad. La detección en etapas iniciales es crucial para iniciar tratamientos más efectivos y mejorar las perspectivas de los pacientes.
Participaron 1.767 personas pertenecientes a varias cohortes hospitalarias, reforzando la fiabilidad y aplicabilidad del estudio. Anteriormente, este equipo de investigación ya había demostrado la capacidad del biomarcador para prever el riesgo de Alzheimer durante su fase preclínica. Ahora, con este nuevo desarrollo, han conseguido automatizar y escalar el análisis para su uso global en laboratorios clínicos.
El Dr. Marc Suárez-Calvet, uno de los autores del estudio, ha destacado la necesidad de que estos resultados sean interpretados por profesionales capacitados, ya que el diagnóstico certero exige una valoración neurológica integral. También advirtió que, aunque el test es altamente preciso, su eficacia podría disminuir en pacientes mayores de 80 años o en aquellos con otras afecciones de salud.
Este avance podría tener importantes repercusiones económicas, al reducir significativamente los costos relacionados con el diagnóstico del Alzheimer, estimados entre un 60% y 81% menos que los métodos actuales. La simplicidad y accesibilidad del análisis podrían democratizar el acceso al diagnóstico precoz, mejorando el tratamiento y atendiendo a un mayor número de pacientes.
No obstante, los investigadores advierten que aún son necesarias más investigaciones para incorporar este análisis de modo efectivo en la práctica clínica general. A pesar de ello, los resultados son prometedores y representan un paso hacia diagnósticos más accesibles y precisos en la lucha contra el Alzheimer.