En la vibrante ciudad de París, del 10 al 12 de junio, el evento NVIDIA GTC París ofrecerá una experiencia que promete desafiar las nociones tradicionales del arte. En el pabellón 7.1 del Paris Expo Porte de Versailles, se despliega una innovadora galería que fusiona tecnología de inteligencia artificial con creatividad artística.
Esta exposición, sin precedentes, reúne a artistas visuales, diseñadores de moda y creadores digitales de todo el mundo. Las obras van desde pinturas al óleo inspiradas en sueños hasta campañas de moda sorprendentes protagonizadas por tubérculos, empleando el poder de NVIDIA como soporte técnico y creativo.
Uno de los nombres destacados es aurèce vettier, un artista que transforma recuerdos personales en arte onírico mediante inteligencia artificial. Con su serie «le travail des rêves», vettier transforma la tecnología en un espejo de su memoria íntima. Este proceso ofrece una exploración poética de naturaleza y realidad más allá de lo ordinario.
Desde Senegal, Linda Dounia Rebeiz presenta «Once Upon a Garden», una obra que recrea flores extintas del Sahel, denunciando la falta de representación del Sur Global en los sistemas de IA. La pieza resuena como un acto de protesta ecológica y preservación cultural.
Entangled Others Studio, por su parte, lleva el arte más allá con su obra «Self-Contained», que convierte datos en arte almacenado en ADN digital, mientras que el estudio italiano fuse* utiliza relatos oníricos para crear «Onirica ()», una combinación de psicofisiología y arte digital. En tono humorístico, Jeroen van der Most deconstruye clichés publicitarios con su «Vegetable Vendetta», una crítica a la superficialidad del marketing moderno.
El evento también sirve de plataforma para el futuro de la moda. A través de colaboraciones con el Institut Français de la Mode y la Fashion Innovation Agency, se plantea cómo la IA puede revolucionar la creación de moda, ofreciendo conceptos y colecciones innovadoras sin necesidad de confección tradicional.
La galería de arte con IA no solo expone obras, sino que incita al debate sobre el papel del arte en la era digital. Con una mirada al futuro, invita a los participantes a cuestionar la autoría, la memoria y la sostenibilidad en un mundo cada vez más dominado por algoritmos.
Para aquellos que no puedan asistir físicamente, la exposición está disponible en línea, permitiendo que todos tengan acceso a esta ventana al arte del mañana, desde cualquier rincón del mundo.
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