La ciudad ha iniciado un ambicioso proyecto para mejorar la comunicación subterránea, comenzando con la activación de nuevos túneles que facilitarán una señal más robusta. Esta primera fase es crucial para garantizar una cobertura sin interrupciones en las zonas más críticas y de alta afluencia, proporcionando una experiencia más fiable para los usuarios de redes móviles y servicios de emergencia que dependen de una conexión estable.
Una vez que estos primeros túneles estén operativos, el siguiente paso será evaluar el resto de la infraestructura subterránea para identificar y subsanar las limitaciones en la señal que pueden existir en otras partes de la ciudad. Este proyecto promete modernizar la red subterránea en su totalidad, asegurando que todas las áreas, sin importar lo profundo, estén correctamente integradas en el ecosistema de comunicación urbana.
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