La Comunidad de Madrid facilitará el funcionamiento de actividades destinadas a personas mayores en municipios con menos de 2.500 habitantes, buscando fomentar su autonomía, prevenir la soledad y promover un envejecimiento activo. La medida, impulsada por la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, se materializará en una resolución próxima que permitirá prestar servicios de convivencia social en locales municipales sin requerir una estructura permanente de dirección.
El objetivo de esta iniciativa es mejorar la calidad de vida de los mayores en entornos rurales, donde la densidad de población es menor y el riesgo de aislamiento social, mayor. Al eliminar la necesidad de una dirección permanente, se pretende simplificar la puesta en marcha de actividades y servicios que brinden apoyo y acompañamiento a este segmento de la población, facilitando su integración y participación en la comunidad.
De esta manera, la Consejería busca ofrecer una respuesta eficiente a la demanda de servicios de atención social en áreas rurales, asegurando que los mayores puedan acceder a actividades que les permitan mantenerse activos, autónomos y conectados socialmente. Esta resolución se alinea con las políticas regionales de envejecimiento activo y reducción de la soledad, reforzando el compromiso de la Comunidad de Madrid con el bienestar de sus ciudadanos mayores.