La ciudad de Madrid se prepara para una nueva etapa en la restauración de su patrimonio cultural, esta vez con una iniciativa que une el arte, la conservación y la colaboración público-privada. La emblemática Fuente de Neptuno, parte del paisaje protegido por la UNESCO en el Paisaje de la Luz, será objeto de una restauración que la cubrirá temporalmente con una lona diseñada por el reconocido artista Javier Mariscal.
El Ayuntamiento de Madrid, en su constante afán por fortalecer el programa de conservación del patrimonio cultural municipal, ha firmado un convenio con una destacada empresa del sector cosmético. Este acuerdo, formalizado en octubre, no solo garantizará la financiación necesaria para el programa de restauración de monumentos, sino que además servirá como plataforma para la promoción de la cultura y el arte en la ciudad.
La colaboración incluye una creación artística exclusiva de Mariscal que estará inspirada en la propia Fuente de Neptuno y será impresa en la lona que cubrirá la fuente durante los dos meses que dure su restauración. Dicha lona también incluirá elementos publicitarios de marcas de lujo pertenecientes a la división de la empresa colaboradora, fusionando así el arte con el marketing en una estrategia que busca ser tanto visualmente atractiva como funcional.
La empresa cosmética, conocida por su compromiso con la preservación del patrimonio cultural a nivel global, ha jugado un papel vital en la conservación de lugares históricos, siendo recientemente uno de los principales donantes para la recuperación de la Catedral de Nôtre Dame tras el devastador incendio de 2019. Este antecedente refuerza la confianza en su capacidad para contribuir de manera efectiva a proyectos culturales en ciudades icónicas como Madrid.
El proyecto no solo revitaliza una pieza fundamental del patrimonio madrileño, sino que también busca difundir y poner en valor el sitio declarado Patrimonio Mundial del Paseo del Prado y Buen Retiro, conocido como el Paisaje de la Luz. Esta iniciativa se inscribe en una línea de acciones que buscan fortalecer la imagen de Madrid como una ciudad comprometida con la gestión eficaz, la innovación a través de sinergias público-privadas y el fomento de su riqueza cultural a nivel internacional.
Con este paso, Madrid no solo se embarca en una misión de restauración arquitectónica, sino que también lanza un mensaje contundente sobre la importancia de preservar la herencia cultural, invitando tanto a locales como a visitantes a apreciar la fusión entre el arte contemporáneo y la histórica esencia de la ciudad.