En los últimos diez días, tres personas han perdido la vida en ataques con navajas en Cataluña, el incidente más reciente ocurrió en un autobús nocturno en Castelldefels. Esta situación ha encendido las alarmas y generado preocupación entre los residentes, quienes han visto un aumento notable en la violencia callejera. Los Mossos d’Esquadra, la policía autonómica, están intensificando sus esfuerzos para enfrentar esta problemática, ya que se han recolectado alrededor de mil navajas y cuchillos al mes como parte de sus operaciones de seguridad. Estos ataques no solo están afectando la percepción de seguridad, sino que también han llevado a las autoridades a replantear sus estrategias de vigilancia y prevención.
La respuesta de las autoridades ha sido visible, con un incremento en la presencia policial en las calles desde el año pasado. Sin embargo, la eficacia de estas medidas está siendo cuestionada debido al reciente aumento en incidentes violentos. Los Mossos d’Esquadra se encuentran bajo presión para mejorar la seguridad y devolver la tranquilidad a las comunidades afectadas, mientras las familias de las víctimas siguen exigiendo justicia. La situación plantea un desafío significativo, tanto para las fuerzas del orden como para las autoridades locales, que buscan implementar medidas efectivas para prevenir futuros ataques y garantizar la seguridad de los ciudadanos.
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