El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha aprobado una inversión de 10 millones de euros para el apoyo a las familias que acogen a niños tutelados en el próximo año. Esta decisión refleja un aumento de 500.000 euros respecto al presupuesto del año anterior, mostrando el compromiso del gobierno regional con el bienestar de los menores en situación de tutela.
Este incremento en la dotación presupuestaria tiene como principal objetivo asegurar el sostenimiento y la mejora del acogimiento familiar en la región, garantizando que las prestaciones asistenciales se mantengan a lo largo de todo el ejercicio 2024. Además, se busca anticipar y responder eficazmente a la llegada de nuevas familias que deseen participar en el programa de acogida, asegurando que estas también reciban el apoyo necesario.
La decisión de incrementar el presupuesto no solo refuerza la importancia que la Comunidad de Madrid otorga a la figura del acogimiento familiar como alternativa preferente para el cuidado de menores tutelados, sino que también subraya su interés en fomentar un entorno seguro y afectivo para estos jóvenes.
La inversión permitirá que las familias acogedoras continúen recibiendo las ayudas necesarias para cubrir los gastos que implica el cuidado de un niño o adolescente en situación de tutela, asegurando que ningún menor se quede sin la oportunidad de crecer en el seno de un hogar que les brinde amor y estabilidad.
Con esta acción, la Comunidad de Madrid evidencia su compromiso con la infancia y con la mejora continua de los sistemas de protección social, promoviendo políticas que favorezcan el crecimiento y desarrollo de todos los menores bajo su tutela. El gobierno regional busca consolidar un modelo de atención que no solo responda a las necesidades materiales, sino que también aporte a las familias los recursos necesarios para ofrecer un entorno enriquecedor y protector.
La previsión y proactividad reflejadas en esta medida son un espejo del interés del gobierno madrileño por ajustar la atención a la realidad cambiante y las necesidades emergentes, asegurando que cada niño tutelado pueda crecer en un entorno familiar que le acompañe en su desarrollo integral.
