La ciudad de Alcalá de Henares se prepara para sus tradicionales Ferias y Fiestas, que tendrán lugar del 23 al 31 de agosto, con la presentación de un nuevo Plan Especial de Seguridad. Este miércoles, la sala de Comisión de Gobierno del Ayuntamiento fue el escenario de una Junta Local de Seguridad Extraordinaria, donde se detallaron las medidas que se implementarán para garantizar la seguridad durante los festejos.
Durante los últimos dos meses, las jefaturas de la Policía Local y Nacional han estado trabajando en este plan de seguridad, que también cuenta con la colaboración de la Guardia Civil, la Delegación del Gobierno en Madrid, la Comunidad de Madrid y Protección Civil. Judith Piquet, alcaldesa de Alcalá, presidió la sesión, acompañada por la concejala de Seguridad Ciudadana, Orlena de Miguel.
El operativo de seguridad se centrará en el refuerzo de controles y una mayor presencia policial en las zonas de ocio principales, sin desatender otras áreas de la ciudad. «Tenemos las líneas maestras y en las próximas semanas terminaremos de concretar toda la coordinación para tratar de reeditar el éxito de las Ferias pasadas o incluso mejorarlas», afirmó De Miguel.
El despliegue de seguridad incluirá un operativo de Policía Local activo las 24 horas durante todos los días de las ferias, con el apoyo de policías de otras localidades, y cerca de 1.100 servicios por parte de la Policía Nacional. Además, la Guardia Civil estará encargada de los accesos a la ciudad para el control de armas y sustancias, y Protección Civil disponibilizará 70 voluntarios diarios.
Se realizarán vigilancias dinámicas en áreas con alta concentración de personas para evitar la formación de grupos para el consumo de alcohol. Se introducirá también una unidad canina para la detección de estupefacientes.
Uno de los nuevos elementos de prevención es el despliegue de agentes formados en ‘Osint’ para detectar y anticiparse a grupos conflictivos y bandas violentas. Habrá controles específicos en las estaciones de Cercanías Central y La Garena. Policías de ambos cuerpos se dedicarán a prevenir hurtos de móviles, carteras y otros objetos de valor en las zonas más concurridas.
El sistema de seguridad se complementará con hospitales de campaña y UVI móviles en puntos clave como el Recinto Ferial, la plaza de Cervantes y el Huerto del Obispo, donde se concentran las actividades principales.
En el Recinto Ferial se reforzará el anillo de vallado y se implementarán filtros de seguridad en las entradas. Un sistema de cámaras perimetral y unas 16 cámaras de videovigilancia controlarán y supervisarán las áreas con mayor flujo de personas. Además, grupos de trabajo conjuntos de la Policía Local y Nacional establecerán protocolos de actuación para minimizar tiempos de reacción e intervención.
La plaza de Cervantes será ‘blindada’ con vehículos policiales, vallados y barreras de hormigón en las vías de acceso, para impedir el ingreso de vehículos no autorizados que pongan en riesgo la seguridad. Agentes de la Policía Local y Nacional controlarán los accesos para prohibir la entrada de vidrios u objetos peligrosos. Similar control se aplicará en los accesos a la Huerta del Obispo, con el apoyo de seguridad privada, y se dispondrá de vigilancia en los estacionamientos de los eventos musicales para evitar robos y destrozos.
Con este plan, Alcalá de Henares aspira a repetir o incluso superar el éxito de las celebraciones anteriores, ofreciendo un entorno seguro para todos los asistentes.
