Un intenso fin de semana ha azotado a España debido a varios incendios forestales, provocados por una combinación de calor extremo, vientos cálidos y vegetación seca. El incendio más devastador se ha registrado en Valdecaballeros, Badajoz, donde ha arrasado 2,500 hectáreas, supuestamente a causa de un pirómano. En Toledo, otro incendio ocasionó el confinamiento de un pueblo de 2,000 habitantes y el desalojo de cerca de 60 vecinos de una urbanización. Hasta la fecha, en 2025, más de 31,500 hectáreas han sido consumidas por el fuego en todo el país, unas cifras que superan en comparación a las que se reportaron en el mismo periodo de 2024.
Las autoridades han intensificado la vigilancia ante el aumento de incendios de gran magnitud, con un total de diez ocurridos hasta ahora, en comparación con nueve hasta julio del año pasado. El fenómeno del calor extremo ha llegado antes de lo habitual, intensificando la gravedad de los sucesos. Las labores de extinción han sido complicadas y han requerido la movilización de efectivos aéreos y terrestres. Este fin de semana también hubo incidentes significativos en Alicante y Almería, donde los incendios continúan activos. Por otra parte, se ha comenzado a investigar la posible acción de un pirómano en la serie de incendios que ha afectado repetidamente a la misma zona en los últimos años.
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