Altas temperaturas y vientos cálidos han generado un panorama preocupante de incendios en la península, con la jornada del sábado marcada por el estallido de una decena de fuegos. En Badajoz, un incendio en la localidad de Valdecaballeros se ha tornado especialmente crítico, afectando ya a más de 1.000 hectáreas. Las autoridades han evacuado un camping con 140 personas y el poblado de Cíjara, donde se celebraban fiestas locales, debido a la rápida evolución del fuego. A pesar de los esfuerzos iniciales, la Consejería de Gestión Forestal y Desarrollo Rural ha reportado una duplicación en la estimación de hectáreas afectadas y ha reforzado el dispositivo de extinción con más unidades terrestres y materiales pesados.
Mientras tanto, otros incendios en Ávila y Alicante han mostrado signos de estabilización, aunque no se han extinguido completamente. En Navaluenga, el fuego ha calcinado 1.500 hectáreas, pero gracias al aumento de la humedad y a un descenso de temperaturas, la situación ha mejorado. En Ibi, el incendio ha afectado a 185 hectáreas, aunque se ha dado por estabilizado. Sin embargo, se prevén condiciones cambiantes para la noche, lo que mantiene en alerta a los equipos de extinción. Incendios también se han reportado en varias localidades de Andalucía y Madrid, donde se han movilizado recursos significativos para su control y extinción.
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