Luis Rubiales, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), compareció ante la Audiencia Nacional de San Fernando de Henares para declarar sobre el polémico beso que dio a la futbolista Jenni Hermoso durante la final del Mundial. Después de su intervención judicial, Rubiales asistió a una comida con su abogada, Olga Tubau, y otros amigos, durante la cual ambos protagonizaron gestos que han suscitado controversia. Rubiales fue captado lanzando un beso al aire, lo que se ha interpretado como una burla del incidente con Hermoso. Además, Tubau realizó gestos con las manos y se rió, lo que algunos sugieren podría ser una imitación de la intérprete de lengua de signos involucrada en el juicio, aumentando las críticas hacia su comportamiento.
En el ámbito legal, Olga Tubau ha presentado el informe final en defensa de Rubiales, solicitando la absolución del expresidente de la RFEF, argumentando que existió consentimiento de Hermoso y cuestionando la coherencia de las pruebas aportadas por la acusación. El proceso judicial continuará con las conclusiones de las defensas de otros tres acusados: Jorge Vilda, Rubén Rivera y Albert Luque, quienes enfrentan cargos por presunto delito de coacciones. Se espera que cada uno tenga la oportunidad de ofrecer su última declaración antes del fallo definitivo en el caso, que ha capturado la atención tanto de la opinión pública como de los medios de comunicación por sus implicaciones para el deporte y cuestiones de conducta ética en el ámbito profesional.
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