En la última emisión de «Mask Singer», uno de los programas más populares de la televisión actual, se presentó una nueva máscara que sorprendió tanto al público como al panel de investigadores. Bajo el disfraz de un Brócoli, un enérgico participante animó el escenario al ritmo de una sesión musical de Bizarrap y Quevedo, capturando la atención con su energía y provocando una ola de especulaciones sobre su identidad. Entre las variadas conjeturas de los investigadores, Alaska destacó por sugerir que se trataba de una persona joven, posiblemente el piloto Pedro Acosta. Ana Milán, apostó por el actor Gorka Ochoa, mientras que el dúo de los Javis propuso un inesperado nombre, mencionando a alguien supuestamente octogenario.
El misterio se resolvió cuando el público animó con entusiasmo al enmascarado para que revelara su identidad, descubriéndose que el político Miguel Ángel Revilla era quien se encontraba bajo el disfraz. Con humor, mencionó lo incómoda que resultaba la enorme cabeza del disfraz, provocando risas entre el público al compararla con un posible método de interrogatorio. A sus 81 años, Revilla demostró estar en excelente forma y fue ovacionado por su valentía y sentido del humor, dejando en claro que aún le queda mucho por ofrecer. Ana Milán lo elogió por su actuación y la energía con la que había levantado a todo el plató, a lo que Revilla respondió con un optimista «¡Y lo que queda!» al despedirse.
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