En una tarde de gran expectación en La Malagueta, el torero onubense protagonizó una destacada actuación, logrando cortar tres orejas y salir a hombros. Su habilidad y destreza en el ruedo opacaron al astro peruano, que se retiró sin trofeos. La faena del onubense fue especialmente notable por su valentía y técnica, ganándose así el reconocimiento del público presente en el coso malagueño. La corrida de Victoriano del Río, caracterizada por su fuerza y dificultad, añadió aún más mérito al éxito del joven torero.
Por otro lado, Manuel Escribano también destacó en la jornada al cortar dos orejas del mejor lote de la corrida. A pesar de lidiar con una corrida complicada, fea y correosa, Escribano demostró su experiencia y pericia, asegurándose un lugar en el reconocimiento del público. Aunque el astro peruano no tuvo la misma suerte, la jornada fue memorable por las habilidades demostradas por los otros toreros, subrayando el talento presente en el ruedo de La Malagueta.
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