Un reciente informe de International Data Corporation (IDC) destaca un panorama de crecimiento notable en la inversión en transformación digital en Europa, Oriente Medio y África (EMEA), proyectando un gasto total de 1.201 mil millones de dólares para 2028. Con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 15,8% entre 2024 y 2028, la región se prepara para un cambio significativo liderado principalmente por las inversiones en inteligencia artificial (IA), especialmente la inteligencia artificial generativa (GenAI).
El estudio indica que casi la totalidad de los CEOs en la región, un 99%, consideran la IA generativa una prioridad en sus agendas empresariales. Erica Spinoni, analista sénior de IDC, subraya la relevancia de la IA al afirmar que «está redefiniendo los modelos de negocio digitales y remodelando los activos digitales». Se espera que para 2027, las empresas impulsadas por IA se conviertan en la norma, otorgando experiencias más inmersivas y creando nuevos modelos operativos.
Las inversiones en tecnologías digitales abarcan un espectro amplio que incluye desde robots y conectividad, hasta computación en la nube y dispositivos IoT. IDC ha categorizado estas tecnologías en tres grupos de crecimiento: uno de crecimiento estable como los dispositivos personales y servicios de conectividad; otro alineado con la transformación digital, que incluye IoT y servicios TI; y un grupo de crecimiento acelerado, compuesto por IA generativa, computación en la nube y tecnologías emergentes como la realidad aumentada (AR) y la realidad virtual (VR). Giulia Carosella, gerente de investigación en IDC EMEA, destaca que «la IA generativa es el principal impulsor de la inversión digital».
Por sectores, los servicios financieros lideran con la mayor tasa de crecimiento, enfocados en la ciberseguridad y la experiencia del cliente, potenciados por la IA. La distribución y los servicios, a pesar de las tensiones geopolíticas, mantienen su apuesta por plataformas digitales. La infraestructura, con alta madurez digital, sigue invirtiendo para reforzar su competitividad, mientras que el sector de manufactura y recursos experimenta un impulso en automatización y productividad gracias a la IA. En el ámbito público, las inversiones se concentran en la digitalización de servicios, aún limitadas por restricciones presupuestarias.
El informe señala varios impulsores del crecimiento digital en la región: la prioridad estratégica de la IA y la GenAI, las regulaciones y la ciberseguridad, así como las oportunidades de liderazgo en tecnologías emergentes. Sin embargo, el camino no está exento de desafíos, como los altos costos de inversión y la devolución incierta, tensiones geopolíticas que condicionan los presupuestos, y la falta de talento digital.
Erica Spinoni advierte sobre estos retos, destacando que «AI y GenAI no son solo avances tecnológicos; representan imperativos estratégicos» para las empresas en EMEA. A pesar de las barreras, la transformación digital sigue siendo una herramienta fundamental para optimizar costos y mejorar procesos en múltiples industrias, lo que asegura su crecimiento sostenido en los próximos años.
El estudio de IDC EMEA Digital Transformation Market Forecast, 2024–2028, proporciona una visión completa sobre estas tendencias emergentes y subraya la importancia de la transformación digital como motor de crecimiento y competitividad en la región.