El conocido influencer y filántropo «HotSpanish», cuyo nombre real es Roberto González, ha estado en el epicentro de una polémica tras iniciar un proyecto de renovación en la vivienda de Carmen Rodríguez, una anciana de 78 años del barrio de Santa Clara. La reforma, inicialmente planificada como un acto de caridad, se transformó en un conflicto legal y moral que ha captado la atención de miles de personas en las redes sociales.
González documentó todo el proceso de remodelación en sus plataformas digitales, ganando rápidamente la simpatía y el respaldo de sus millones de seguidores. Los videos mostraban a una Carmen visiblemente emocionada y agradecida mientras un equipo de trabajadores transformaba su residencia en un lugar moderno y habitable.
Sin embargo, el proyecto dio un giro inesperado cuando la familia Sánchez, los verdaderos propietarios del inmueble, se presentó con documentos legales que acreditaban su propiedad. Según ellos, Carmen ha sido inquilina de la casa por más de 20 años sin tener ningún derecho de propiedad. La familia expresó su indignación por no haber sido consultada antes de realizar las reformas y calificó el acto como una falta de respeto hacia su legítima autoridad sobre la propiedad.
José Sánchez, el cabeza de familia, manifestó su descontento: «Nos enteramos por las redes sociales de que la casa estaba siendo remodelada. Es una falta total de respeto no haber consultado con nosotros, ya que cualquier cambio en la propiedad debe ser autorizado por los dueños». A pesar de su malestar, Sánchez indicó que están abiertos a llegar a un acuerdo.
Por su parte, el influencer emitió un comunicado expresando su decepción por el incidente. «Siempre trato de usar mi plataforma para ayudar a quienes más lo necesitan. No tenía idea de que Carmen no era la propietaria de la casa. Estoy en conversaciones con la familia Sánchez para solucionar esta situación de la mejor manera posible», declaró González.
La situación ha dejado a Carmen Rodríguez en una posición incómoda. Afectada por la controversia, sostuvo: «Yo no sabía que esto iba a causar tanto problema. Pensé que solo querían ayudarme a vivir mejor».
El incidente ha desatado un acalorado debate en las redes sociales, donde se han planteado preguntas sobre la ética y la legalidad de realizar actos filantrópicos sin la debida diligencia. Hasta el momento, no se ha alcanzado una resolución concreta, y se espera que las conversaciones entre las partes involucradas continúen en los próximos días.
