Leandro de Souza, reconocido como el hombre más tatuado de Brasil con el 95% de su cuerpo cubierto de tinta, ha decidido dar un drástico giro en su vida. Motivado por un despertar espiritual y profundas inquietudes cristianas, ha iniciado el proceso de eliminar sus tatuajes, comenzando por los de su rostro. El joven, quien alguna vez abrazó un estilo de vida lleno de excesos, ahora define su pasado como “una atracción de circo”. Actualmente, destina los fondos que recauda a través de sus seguidores para costear las dolorosas sesiones de láser necesarias para borrar la tinta, un proceso que describe como un alto coste tanto económico como físico, ya que el dolor es intenso a pesar de la anestesia.
Leandro, quien ganó en 2023 el premio al hombre más tatuado de Brasil, sigue compartiendo su transformación a través de su cuenta de Instagram. En sus publicaciones, documenta el progreso del borrado, incluidas escenas donde se le ve llorar en la camilla debido al insoportable dolor del láser en las áreas más sensibles de su rostro. Aunque algunas sombras de los tatuajes aún persisten, gran parte de ellos ha desaparecido, evidenciando así su compromiso con este nuevo capítulo de su vida. A pesar de que afirma que los tatuajes no son «cosa del diablo», reconoce que necesita enfrentar las consecuencias de su antiguo estilo de vida.
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